Cler (ahora Roma), deja atrás el abandono y va a pasar sus primeras navidades en familia. Estamos seguros de que va a tener una vida maravillosa, repleta de mimos, juegos y un sin fin de aventuras. Sé muy feliz pequeña, eres un pedacito de cielo al que vamos a echar de menos. Muchísimas gracias por adoptar sin importar la edad, ni el tamaño!
Finales Felices