A Naty la rescatamos a punto de ser sacrificada junto a sus bebés recién nacidos en una perrera de Valencia (España) el verano del 2019. De nuevo pedimos acogida, pero era de esperar que si salen pocas individuales, no iban a salir para una familia entera, así que nos liamos la manta a la cabeza y nos organizamos como buenamente pudimos. Fue una mamá ejemplar que vio salir adoptados a todos sus hijos y esperó sin perder la esperanza la oportunidad de ser ella la elegida algún día. Ese día ha llegado, Naty por fin podemos decir que tiene una familia, una pareja encantadora que se enamoró de ella al instante y que pese a no poderla adoptar en ese momento, se involucraron tanto que venían a compartir paseos, tiempo y crear vínculo hasta que su situación cambiara. Gracias por todo chicos, no imaginamos una familia mejor para esta mamá coraje, sed MUY felices!
